La cirrosis ocurre cuando el tejido hepático es dañado por diversas causas (alcoholismo, hepatitis, hemocromatosis, colangitis esclerosante, ... etc), y es sustituido por tejido fibroso cicatricial.
Estructura normal del higado |
Pero claro, dicho tejido ya no es funcional, y además altera la
arquitectura histológica lobular del hígado. Crece aislando áreas de
tejido hepático (nódulos de regeneración), y estos ya no pueden cumplir
su función correctamente.
Es decir: ni hacen, ni dejan hacer.
Es decir: ni hacen, ni dejan hacer.
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1 - Aspecto histológico de tejido hepático sano. Se aprecia la forma característica de los hepatocitos con la vena centrolobulillar.
2 - Tejido hepático cirrótico. Las bandas azuladas son tejido fibroso que envuelven y aislan los nódulos de regeneración.
Macroscópicamente también se altera la estructura y contorno del hígado conforme va avanzando el daño.
Veremos su aspecto desde el punto de vista ecográfico:
En los estadíos iniciales se produce un aumento de su volumen (Hepatomegalia). En la imagen podemos ver un corte sagital del lóbulo derecho, junto al riñón derecho.
La medición protocolaria se realiza en dicho lóbulo en su eje antero-posterior.
Mas allá de 15cm se considera que hay hepatomegalia. En este caso mide 19,26cm.
En esta imagen obervamos el corte transversal del lóbulo derecho de un hígado sano. En él puede observarse la vena suprahepática derecha y parte de la media.
Su ecogenicidad es normal y uniforme, sus bordes son lisos.
En esta imagen observamos un higado con varias caracteristicas de una cirrosis ya avanzada:
- Bordes lobulados (nódulos de regeneración)
- Ecogenicidad tosca y no uniforme
- Atrofia y disminución de su tamaño
- Presencia de líquido perihepatico y ascitis.
Al verse alterada la estructura vascular, la sangre ya no fluye con normalidad y le es mas difícil su circulación. Ello provoca la complicación mas frecuente de la cirrosis que es la Hipertensión Portal (HTP).
Toda la sangre que va rumbo al hígado se encuentra con una resistencia a su entrada. Ello eleva la presión sanguínea en la vena porta dilatándola y con el tiempo va desencadenando otras consecuencias vasculares:
- Varices esofágicas y gastricas
- Recanalización sanguínea de la Vena Umbilical y circulación periférica
- Esplenomegália
Y por si fuera poco los hígados cirroticos además son mas propensos a desarrollar un carcinoma!.
En fin!. Tras todo esto uno llega a la conclusión de que, en lo que de nosotros dependa mas nos vale cuidarnos el higado, porque si esa maravilla de factoria quimica nos falla todo se hunde!.
Un saludo y ¡Feliz Año Nuevo para todos!
Postdata: Cuidado con el alcohol esta Navidad, vuestro higado os lo agradecerá!
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